Ramón Redondo tuvo la brillante idea de llevar a un tablero de juego los videojuegos de la infancia que más le han volado la almendra.
Con esa premisa creó Power Up, un Run-And-Gun completísimo que hará las delicias de todos los amantes del retrogaming de 16 bits. ¡Matarás marcianos como si no hubiese un mañana!